Yósmösis
Septiembre 2019
Performance en PEPA - Sala ABM Madrid

Yósmösis se celebra en Madrid bajo la participación en PEPA (Pequeño Evento de Performance Art) en una sesión colectiva en la sala ABM Confecciones con la organización de Analía Beltrán i Janés y junto a los artistas Eliu Almonte y Pancho López. En Madrid repito la estructura de tres acciones de la Sala Chema Cobo de Málaga y añado una acción llamada In-móvil. Junto con la proyección de vídeo y sonido despliego la performance hasta los 45-50 minutos, realizando consecutivamente las cuatro acciones: Yo mimé conmigo, Porque yo lo valgo, In-móvil y Me rebelo, luego somos. Cuatro acciones que exploran desde diferentes aspectos la relación entre lenguaje y construcción identitaria.
El lenguaje siempre ha ocupado un lugar prominente en el estudio de la mente, para muchos es en las relaciones entre lenguaje e identidad donde se encuentran las claves de nuestro ser y estar en el mundo. Las identidades surgen de la narración del yo, de la manera como nos representamos y somos representados. El lenguaje nos distingue, nos construye y nos comunica. Pero también se constituye en distancia a la realidad y la transforma.
Yo mimé conmigo
YO MIMÉ CONMIGO explora la autorreferencialidad y la hiperexposición del signo identitario por excelencia, el nombre, como elemento central en la dialéctica de construcción del otro. En esta primera pieza me dirijo a los presentes en un relato verbal y gestual sobre mi persona en el que solo y exclusivamente repito mi nombre de múltiples formas. A pesar de la evidencia de que gestualidad, entonación y dialéctica comparten el mensaje sobre mi cuerpo, la repetición incesante y afásica del nombre propio conduce a toda la comunicación al espacio de lo absurdo y lo sarcástico. El final de la acción es una autoextracción de sangre, que vierto en una copa y ofrezco al público. Termino escribiendo mi nombre en la pared de la sala con la sangre que sobra tras haberla probado un voluntario entre los asistentes.
Porque yo lo valgo
PORQUE YO LO VALGO propone una incursión en el mundo de la comunicación de masas, explora el lenguaje publicitario como un sistema arbitrario, unidireccional y vertical, dirigido a influir en la construcción y conducta del individuo a través de su instrumento más efectivo: el eslógan, esa palabra o frase corta expresiva y fácil de recordar, que a menudo consigue su quintaesencia entrando a formar parte del propio ideario colectivo con el paso del tiempo.
La segunda acción comienza con la sala a oscuras y con luz negra en varios puntos del espacio, procedo a la lectura de una extensa serie de eslóganes en una composición que atiende tanto al concepto como a la repetición de términos. Cada eslógan viene impreso en una pegatina fluorescente que previamente he preparado en un gran rollo. Conforme voy leyendo los eslóganes, los voy pegando primero sobre mí y posteriormente sobre cada persona del público.
In-móvil
Bajo la repetición pregrabada en multitud de idiomas de la frase "El móvil sirve para conectar a la gente que se encuentra a distancia, pero también sirve para mantener a distancia a la gente que se conecta." la acción se desarrolla en el estatismo absoluto mientras contemplo mi propio móvil, en el celular se ha grabado previamente y se reproduce un vídeo con pantallazos intermitentes que colorean repetidamente mi rostro.
Me rebelo, luego somos
ME REBELO, LUEGO SOMOS propone una presentación alegórica del estadio del espejo de Lacan, una confrontación a la propia imagen de cada individuo del público. Portando un espejo que presento frontalmente a cada persona, ilumino cada rostro durante unos segundos y pronuncio citas de varios pensadores acerca de los conceptos de lenguaje e identidad. Al mismo tiempo se proyecta un vídeo en la sala que consiste en una serie de niños en su primer encuentro con su propia imagen frente al espejo o en su estadio del espejo lacaniano.
La etapa (o el estadio) del espejo de Jacques Lacan
La etapa del espejo -le stade du miroir- es un concepto de la teoría del psicoanalista francés Jacques Lacan que define una fase del desarrollo psicológico del niño comprendida entre los seis y los dieciocho meses de edad aproximadamente. Etapa en la cual el niño se encuentra por primera vez capacitado para percibirse, o más exactamente, percibir su imagen corporal completa en el espejo. En esta fase, de acuerdo a la teoría lacaniana, se desarrollaría el yo como instancia psíquica o como sujeto.
Lacan observa que el reconocimiento siempre va acompañado de una expresión narcisista de júbilo, pero sólo efímero. Se reconoce y se desconoce casi al mismo tiempo, porque aquello que reconoce no es él, sino justamente una imagen de él. Una imagen separada que no le pertenece. La completud que observa es sólo un engaño. Una figura imaginaria de no fragmentación que al mismo tiempo lo confronta con la propia enajenación. Aquello que el niño ve está fuera de sí, no está en su cuerpo, sino en el espejo. El estadio del espejo implica por ello una experiencia de división o escisión del sujeto. El espejo es la imagen que nos devuelve el mundo completada, pero no nos pertenece.
La elaboración de la figura del otro, en tanto viene a ser otro como yo, mi semejante, viene a ocupar precisamente el lugar que mi imagen ocupaba en el espejo, introducción del aspecto narcisista de toda identificación, ese lugar es a la vez el de mi imagen y el de mi alienación y mi desconocimiento. Y de ahí me vendrá, de lo que el otro es, sabe y dice pero yo desconozco, lo que yo creeré ser, querré saber, y pensaré pensar, pensando pero sin ser o siéndolo sin pensar.